Hace poco escribí y compartí un
texto sobre las diferentes formas de narrar nuestras vidas; en mi caso, por
ejemplo, a través de distintas advocaciones de la Virgen María. Una de ellas,
sin lugar a dudas, es Luján.
Lo primero que me viene a la cabeza,
al corazón, son las peregrinaciones. Mi primera vez caminando fue en el 96,
estando en 4to año… y me quedé en Rodríguez, aunque terminé llegando en micro.
El año siguiente fue muy especial, en muchos sentidos, y uno de los mojones que
tenía marcados en mi agenda era la Peregrinación Juvenil a Luján. En septiembre
de ese año Mary –Mariela por ese entonces, con quien recién empezábamos una linda
amistad- estaba de retiro y le mandé una carta donde le escribía: “Te pido que vengas a Luján porque para mí es
una experiencia muy linda y muy fuerte, y me encantaría compartirla con la
gente que más quiero”. Y aceptó. Fuimos con JuvenCor por la
Parroquia San Rafael. Pero ese año, al llegar a Morón, una lluvia torrencial y
nuestro ser menores de edad nos impidió seguir. Volvimos con Mary, como novios
y esposos, caminando y como apoyo, con el grupo juvenil de la Parroquia del
Perpetuo Socorro, con amigos, en comunidad, varias veces. Gracias a Dios… y a
María.
Un rito hermoso que iniciamos en el
99 fue intentar ir los 18 de febrero, en nuestro aniversario de novios, a
Luján. A pasar el día, tomar unos mates, charlar, comer un asadito, caminar a
orillas del río y, obviamente, darle gracias a nuestra Madre en la Basílica. De
los 6 aniversarios habremos ido en 4… pero esa linda costumbre de ir a Luján
continuó de casados, en familia. Y fuimos de a 2, de a 3, de a 4… y en familia
grande también.
Durante varios años, a su vez, pude
ir como animador o dirigente en campamentos parroquiales y como profe con los
colegios. Siempre yendo a Luján, siempre sintiéndome, sintiéndonos, acompañado(s)
por la Virgencita Lujanera. Ayer, hoy y siempre. Amén.
Y este año me encuentra peregrinando de otra manera, dejando que Ella nos venga a visitar. Madre del Pueblo, rogá por nosotros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario