martes, 27 de agosto de 2019

Cumple de Lu

Mary, ya es el segundo cumple de Lu sin vos. O al menos sin vos como solías estar antes. Hace 14 años vivíamos uno de esos momentos donde realmente comprendés lo que significa la felicidad. Uno de varios, aunque son pocos los que vivís con tanta intensidad. Nos recuerdo yendo a la clínica de madrugada, muy nerviosos, las contracciones, la cuna armada horas antes, la peli que no pudimos terminar de ver, el trabajo de parto, el nacimiento... 
Pero ya hace poco más de 1 año de tu partida. Parece que fue ayer y, a la vez, parece que fue hace tanto. Te extrañamos, cada uno a su manera. Y te sabemos presente, a tu manera también. Hoy te pido especialmente por Lu. Para que la sigas acompañando, cuidando, amando como hasta ahora... y más. Fuiste, sos y serás su madre, su mamá, por siempre. Tuvo la gracia de ser tu hija y eso la va a marcar toda su vida, gracias a Dios. Los 9 meses que la llevaste en tu vientre y los casi 13 años donde estuviste a su lado dejaron huella profunda y valiosa en su vida. Y seguís estando, y ella lo nota bastante seguido. Gracias... por todo lo que siempre te agradezco y hoy, especialmente, por haberme permitido ser, con vos, el papá de Lu. Te amo, locura. E intercedé para que tengamos un bendecido día en familia..
P.D.: Y como en las fotos... dejate besar, abrazala fuerte, y sonreí con ella... como en esa última foto juntas, en la cama, a casi nada de tu partida.
 


domingo, 25 de agosto de 2019

Domingo bajón

Domingo bajón. Lu y Nico salieron de paseo familiar. Yo me quedé en casa, solo, otra vez enfermo... Mientras espero al médico, y para distraerme, pongo Netflix. Ni bien ingreso me avisa que está la 2da temporada de #Mindhunter. Y aparecen los recuerdos. Me asaltan por sorpresa. Fue la última serie que decidimos ver juntos con Mary. En esta misma cama, donde ahora estoy solo y enfermo. Sin Ella. Y decido verla... Domingo bajón. 👣💕

viernes, 23 de agosto de 2019

Te extraño, siempre...

Te extraño, siempre, de muchas maneras, por muchas razones, y especialmente esta noche que no me siento bien... Necesito que me mires, que me mimes, que me digas qué tengo, que cuides a Lu y Nico, que me cuides a mí, que me digas que me voy a mejorar, que me apapuches... Te extraño y tengo muchas ganas de encerrarme en la pieza, solo, taparme todo y llorar porque no estás acá, conmigo... 😟😢 👣💕

viernes, 16 de agosto de 2019

16 de agosto del 97

El sábado 16 de agosto estábamos con algunos amigos reunidos en el colegio vaya a saber uno para qué. Creo que estábamos preparando un retiro para la Comunidad de Menores. Pasaron a buscarnos Ella y el resto de las chicas. Fuimos a Villa del Parque a jugar al pool. Yo nunca había jugado. Ella tampoco. Yo lo disimulé. Ella no. Fuimos y vinimos todos caminando. Aproveché para acercarme a Ella pero se me hacía difícil. Terminé caminando del brazo con otra para que nadie sospeche pero Ella se terminó sumando, sorpresivamente, de mi otro brazo. Y en un momento, no recuerdo bien por qué, quisimos cambiar de tema. Y con mirada cómplice, acompañada de sonrísa pícara, se dio el siguiente diálogo.
- Uy, mirá las estrellas en la noche, dije.
- Qué lástima que no hay, respondió Ella.
Y nos miramos. Y sonreímos. Y supimos que ese momento mágico nos iba a acompañar por siempre.

- Puede dejarse de decir pavadas y continuar con el relato -me bajó el Negro de un hondazo.
¿Quién ganó al pool? A quién le importa. Tan sólo recuerdo que nuevamente quedamos solos con Ella al final del recorrido.

(Extractos editados de la novela "Sueño de una noche estrellada de verano")

jueves, 15 de agosto de 2019

15 de agosto del 97

Al día siguiente, en la mañana del viernes 15 de agosto, fue el entierro de mi abuelo. Por la noche, y con el corazón dolorido, fui a la reunión de JuvenCor. Estuve en el mismo grupo con Vani (quien luego sería mi amiga) y Ella. El tema era cuándo recurríamos a Dios. Justo venía de la muerte de mi abuelo por lo que el tema me llegó mucho...
Cuando finalizó la reunión nos fuimos a cenar a la casa de uno de los pibes... Después de comer nos volvimos caminando dejando a cada cual en su casa... Hasta aquí parecía un día más. Era bastante común que, una vez finalizadas las salidas, los hombres acompañásemos a las chicas hasta sus casas. Era normal el siguiente diálogo.
(Una chica hablando por teléfono con su madre)
-Má, ya voy para casa.
-Era hora. Es tardísimo.
-Sí, má, ya voy.
-¿Sola?
-No, me acompañan los chicos.
-Ah, entonces me quedo tranquila.
Evidentemente, no nos conocía.
Al dejar a mi amigo en su casa, anteúltima parada del recorrido, quedamos solamente Ella y yo. Entonces, haciendo gala de caballero, la tomé del brazo para llegar caminando hasta su casa. Nunca la había visto con otros ojos hasta ese momento. Me sentía en las nubes. Caminaba como si fuese por el aire. Creo que Ella me iba hablando sobre algún tema de bueyes perdidos. No me importó. No podía escucharla. Ese día era la primera vez que llegaba tan tarde a mi casa y encima enamorado.
-Un día muy especial -dijo el Monje.
-Un día para celebrar -agregó el Negro.
Lo vi venir. No quise evitarlo. El Nacho me sopló al oído.

(Extractos de la novela "Sueño de una noche estrellada de verano")

martes, 13 de agosto de 2019

El vacío, la ausencia...


La primera foto es la última que le saqué a Mary, el 11 de agosto del año pasado. La segunda la saqué recién... Lu y Nico duermen en ambas, en nuestra cama, pero hoy hay un vacío, una ausencia.
Noche difícil donde se me hace dolorosamente presente aquel último diálogo, aquel último beso, aquella última mirada, aquella última caricia, aquel último "tomarnos de la mano", aquel último "te amo"...
Pero acá seguimos, caminando, en familia, sabiendo y sintiendo que Ella nos acompaña siempre, nos ayuda a rumbear, nos sostiene, con su presencia eternamente amorosa. 👣💕

sábado, 3 de agosto de 2019