“Te amo”. Recuerdo con mucha
nitidez la primera vez que lo dije, la primera vez que se lo dije: “te amo”. Fue
un 15 de marzo de 1998, domingo, por la noche, en la puerta de su casa. Me
estaba despidiendo, unos besos, hasta mañana y… “te amo”. Me salió. No lo
pensé, no lo planifiqué. Casi que se me escapó, diría. En cuanto solté esas dos
palabritas registré la intensidad del momento. Y al ver su rostro iluminado,
sus ojos brillando, su sonrisa en todo su esplendor, lo supe. Era mi primer “te
amo” y también el primero que Ella escuchaba. Se quedó en silencio un instante
como atesorando esos segundos que nunca olvidaría(mos). Y después… que el
después lo cuente Ella. En la carta de Navidad del 2002, que me entregó para
Año Nuevo del 2003, se puede leer:
“El 15/03 pasó algo que le dio un giro inesperado a nuestras vidas.
Cuando volvíamos de Misa nos que damos en la puerta de mi casa charlando como
siempre de muchas cosas y en un momento me dijiste por primera vez que me
amabas. Yo no podía creer lo que me estabas diciendo y te pedí que lo
repitieras una y mil veces. Ese día recuerdo que me sentía en las nubes. Fue
para mí lo más lindo que había escuchado en mi vida y lo fue porque era de tu boca. Me acuerdo que cuando
te ibas te pedía que me lo dijeras una y otra vez hasta que te enojaste y me
dijiste que no me lo ibas a decir nunca más y me parece que mentiste un
poquito(ja, ja)”.
¿Y cuándo me dijo Ella “te amo”
por primera vez? Denme unos días y les cuento…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario